Este es un queso de larga historia en el campo chileno, tanto por lo homogéneo de su masa, como por los característicos hoyos en su presentación.
Posee un color amarillo suave, textura mantecosa, semi blanda y con un sabor equilibrado con gusto a leche, que resalta. Es ideal tanto para cocktail, como para comidas que requieren un buen queso, como lasañas, canelones, pizzas, budines. Se recomienda acompañar con un Viognier.